A menudo nos preguntáis cuántas personas componen el equipo del proyecto, porque cierto es que son numerosas las tareas e imprescindible mucha organización para sacar adelante todo el trabajo. Actualmente, el equipo lo componen dos personas: Julio Guillén y Fidel del Campo, al que se añaden otras personas en momentos puntuales.
Julio Guillén (Albacete, 1982) es el alma del proyecto, alguien que lleva desde los quince años enganchado a estas músicas de tradición oral en las que la guitarra es motor y elemento central. Julio es etnomusicólogo y dedicó su tesis doctoral a los Animeros de Caravaca de la Cruz, que publicada en 2019 (Los Animeros de Caravaca, Gollarín, 2019). Cuando terminó aquella experiencia se dio cuenta de que un libro no era suficiente para recoger todo lo que había alrededor de la guitarra tradicional y se planteó otra vuelta de tuerca para ir más allá: un documental etnográfico.
Ahí es donde aparece Fidel del Campo (Valencia, 1984). Licenciado en Bellas Artes, tiene un perfil polifacético que va desde el video al diseño gráfico pasando por la fotografía. Alguien con mucha experiencia en distintos campos, con ideas claras y habilidad para el trabajo en equipo.
Desde que comenzó la experiencia de grabar a músicos tradicionales por buena parte de la geografía española, tuvieron claros cuáles eran los roles de cada uno. Julio cuenta con conocimientos musicales que le permiten desenvolverse en situaciones muy dispares y que le ayudan a encontrar exactamente lo que busca: el toque antiguo de la guitarra, algo que lleva aprendiendo desde finales de los 90 en las sierras de Segura y otros lugares. Fidel aporta ese saber hacer para sacar las máximas posibilidades a cada sesión de grabación y trabaja los materiales de forma que, aun contando con medios limitados, el resultado sea de la máxima calidad posible.
Como ya relatábamos en un post anterior, es Julio quien realiza las tareas previas de localización de los protagonistas de cada capítulo. Una vez establecido el contacto, se realiza una primera visita en la que se entrevista al protagonista/s buscando elementos de interés en relación al tema de la guitarra y su universo musical y social: aprendizaje, contexto de esta música, aspectos técnicos (afinaciones, técnicas de golpeo, estéticas sonoras, etc.) y repertorio característico del intérprete o de la zona. En todo caso, se busca que cada protagonista aporte un factor diferenciado al proyecto, algo que complete la visión de lo que habría podido ser la guitarra tradicional y su mundo en su etapa de esplendor.
Después de esa primera visita se configura un guion elaborado a partir de los datos de la entrevista y otros datos que hayan podido localizarse. El objetivo es que la grabación refleje todo el conocimiento posible en relación a esa área geográfica o protagonista. Aunque siempre pueden surgir imprevistos (positivos o negativos) que podrían llenar unas cuantas líneas…
Una vez que se ha realizado la sesión de grabación comienza lo más costoso a nivel de tiempo y dinero: el proceso de montaje y edición que dará lugar a un capítulo. En algunos casos hay que subtitular el capítulo al castellano, con el trabajo que eso conlleva. En otros casos surgen dudas sobre denominaciones o expresiones locales que queremos mantener porque son seña de identidad de cada área cultural.
Habitualmente contamos con colaboradores que llevan a cabo un primer proceso de sincronización del material grabado. De este primer proceso sale ya un video con el montaje semi definitivo, al que habrá que aplicar retoques de color, rotulaciones, etc. Por otra parte, queda realizar retoques en las tomas de sonido, que, por otra parte, son bastante respetuosas con el contexto y no buscan eliminar impurezas, sino más bien, resaltar lo registrado y presentarlo con mayor nitidez. En esto nos ayuda Carlos Martínez, de La Furgoneta Azul Estudios.
Cada capítulo de TBYSH es una cuidada pieza de etnografía donde se busca el mayor respeto por los protagonistas y por los contenidos que aparecen. Pero es un proceso largo que comienza muchos meses antes de que salga a la luz el producto final.